Otto Dix es uno de los pintores alemanes del siglo XX más apreciados
cuyas pinturas y obra gráfica han gozado siempre de un gran
reconocimiento.
Nació en 1891 cerca de Gera (región de Turingia)
en el seno de una familia de clase obrera, hecho que tuvo siempre muy
presente. Pronto destacó por su destreza con el lápiz y durante sus
estudios elementales su profesor de dibujo, Ernst Schunke, le animó a
iniciarse en la carrera artística. Poco después continuó su aprendizaje
con el profesor Carl Senff quien más adelante se negó a apoyar al joven
en sus comienzos artísticos llegándole a augurar un futuro nada
prometedor como pintor.
Desde 1910 a 1914 Otto Dix se forma en la
Escuela de Artes y Oficios de Dresde. Allí se nutre de estilos muy
variados como el de los pintores renacentistas alemanes. Comienza a
experimentar con el cubismo, el futurismo y más adelante el dadaísmo. Y
es en esta etapa cuando comienza a hacer sus primeros autorretratos.
En
definitiva, una fase donde experimenta con pluralidad de estilos pero
en la que, fundamentalmente, se deja inspirar por la filosofía de
Friedrich Nietzsche.
La Gran Guerra
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| De la serie gráfica "Guerra", 1924. Otto Dix |
Como a muchos artistas contemporáneos, la
I Guerra Mundial deja
marcada en Otto Dix una profunda huella que poco después se irá dejando
ver en gran parte de su obra. Y es que el artista vive en primera
persona el horror de la guerra, primero como voluntario y posteriormente
como soldado raso.
Su producción en estos años es, no obstante,
profusa. Realismo, expresionismo, futurismo, abstracto... estilos
entremezclados en colecciones realizadas a lápiz, tiza y tinta.
Los años de la República de Weimar
Al
terminar la guerra, Dix puede continuar con su formación. Vuelve a
Dresde donde se inscribe en la Academia Estatal de Arte. Allí funda
junto con otros artistas expresionistas y dadaístas el "Dresdner
Sezession-Gruppe 1919". De esta forma, este grupo se separaba de los
movimientos artísticos más tradicionales tornándose en estilos más
progresistas. Juntos realizarán varios collage de carácter crítico,
fundamentalmente de fuerte crítica social.
Otto Dix y Berlin
A principios de la década de los 20 Dix establece los primeros contactos con el dadaísmo berlinés, concretamente con Georg Grosz y John Heartfield.
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| De la serie gráfica "Guerra", 1924. Otto Dix |
Karl Nierendorf, un apoderado comerciante de arte, publicó su monografía "El ciclo de la guerra" y se decide finalmente a representar a Dix, lo que dio lugar a que se le apodara graciosamente con el nombre de Nierendix, dada la estrecha relación comercial que se estableció entre ambos.
Poco a poco Dix va haciéndose un nombre en la metrópoli hasta conseguir hacer una exposición individual de dibujos y acuarelas en el Kronprinzenpalais que cosechó grandes éxitos.
A finales del 1925 se establece en Berlín. En 1926 se muda a un apartamento en la famosa Ku'damm. En los alrededores de esa zona del elegante barrio de Charlottenburg al sur del Tiergarten se encontraban las galerías más importantes de todo Berlin. De hecho, el apoyo de los galeristas fue un factor decisivo en el desarrollo del arte berlinés de la época.
En la zona estaba también el "Romanisches Café", un famoso punto de encuentro de la élite artística de Berlín donde se daban cita los dadaístas y los reconocidos pintores de la Secesión, entre ellos, Otto Dix.
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El Salon I, 1921. Otto Dix
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Mientras que al principio de los "años dorados" se dedicó principalmente a desarrollar el estilo dadaísta y el expresionismo, en la segunda mitad de la década se unió al movimiento de la "Nueva Objetividad". En su etapa expresionista-dadísta dibujaba cuerpos desfigurados de soldados lisiados en la guerra y prostitutas en burdeles de un modo grotesco. Su brutal forma de realismo fue tornándose más agresiva hasta encontrarse con el verismo, enclavado dentro del estilo de la Nueva Objetividad del cual Dix fue un maestro.
Por tanto, son sus años en Berlin los que le hacen ascender al zenit de su carrera convirtiéndolo en una figura destacada e imprescindible del modernismo alemán creando un sello muy particular como retratista de la escena bohemia e intelectual de la República de Weimar.
Supo plasmar como nadie los horrores de la guerra así como las imágenes cotidianas de una ciudad desestructurada y decadente de grandes contrastes. Otto Dix vivió lo suficiente en Berlín como para reflejar todas aquellas impresiones que percibía a su alrededor.
Fue uno de los fundadores clave de la Nueva Objetividad, movimiento que se enfrentaba al expresionismo en tanto que se volvió más social y comprometido políticamente.
